Procéso de germinación de las semillas en mesas de cultivo

Index Cuando empezamos la germinación ¿Dónde hacer la germinació? Consejos para una buena germinación. Proceso de germinación Consejo adicional

Cuando empezamos la germinación

Si nos animamos a hacer cultivo a partir de las semillas, os dejamos algunos consejos y experiencias que esperamos que sean de vuestro interés.

Desde febrero hasta abril son meses que podemos hacer germinar muchas semillas que nos darán fruto a finales de primavera y verano, sobre todo aquellas verduras que tienen un ciclo más largo de crecimiento. Si queremos cultivar en nuestras mesas de cultivo tomates, pimientos, berenjenas, sandía, pepino o calabacín, ya podemos empezar con el proceso de germinación. Eso sí, febrero y marzo todavía hace frío y la germinación tendrá que realizarse en espacios protegidos.

Mientras el frío todavía esté presente, es muy aconsejable realizar las germinaciones dentro de casa o en un espacio resguardado de las bajas temperaturas. La germinación no necesita de luz pero la planta, una vez iniciado su crecimiento, necesitará el máximo de sol posible. Por tanto, es importante que deposites los recipientes de germinación, una vez iniciado el proceso de crecimiento de la planta, cerca de la ventana.

¿Dónde hacer la germinació?

La germinación se puede realizar en cualquier recipiente con tierra. Muchas veces se realiza en una maceta con todas las semillas y posteriormente se trasplanta a la mesa de cultivo. Para facilitar este proceso de trasplante, una buena manera es hacer esta germinación en semillero individual. Una vez la planta tenga el tamaño adecuado, podremos realizar el trasplante de forma cómoda y rápida.

Consejos para una buena germinación

Para hacer la germinación en plantel individual, aconsejamos introducir 2 o 3 semillas. De esta forma aseguramos el éxito de la germinación y, a su vez, podremos excluir aquellas plantas que crecen más débiles.

Para tener una buena germinación debemos tener en cuenta varias consideraciones:

- La tierra debe ser poco compactada puesto que la aeración y el drenaje son claves en el proceso. No puede quedar agua estancada, esto facilitaría la creación de hongo y la podredumbre de la semilla. Un sustrato vegetal enriquecido será ideal para asegurar estas buenas condiciones.

- La tierra debe tener humedad constante. Es importante no dejar secar la tierra puesto que nos frenaría el proceso y debilitaría la futura planta. Para obtener esta humedad necesaria y, a la vez, que esta agua no esté en exceso en el recipiente, recomendamos regar con un pulverizador.

- Una vez comienza la germinación, la planta necesitará la máxima luz posible. Si tenemos posibilidad, ubícala cara sur y con sol durante todo el día.

- No es necesario introducir la semilla en el suelo a mucha profundidad. Dejar la semilla entre medio y un centímetro de la superficie será más que suficiente. Mucha profundidad puede dificultar el nacimiento de la planta e incluso que se pudra.

Proceso de germinación

Desde el inicio de la germinación hasta poder trasplantar la planta pueden pasar 6 o 7 semanas. Así pues, si empezamos el proceso durante febrero, en abril ya podremos realizar el trasplante asegurando ya que las temperaturas son más benignas.

Hay semillas en las que podemos hacer la siembra directa, como por ejemplo las habas o las judías. Pero si tienes dudas, hacer la siembra en semillero siempre irá bien. Sobre todo para facilitar el control de la humedad del suelo.

Consejo adicional

Un último consejo: en plantaciones más fáciles y rápidas, como son las lechugas, rábanos o espinacas, podemos combinar semilla y plantel. Así tendremos la planta a punto de cosechar más rápidamente. Por ejemplo, podemos plantar semillas de lechuga por un lado y, a la vez, plantar plantel comprado en la mesa de cultivo. En 5 o 6 semanas ya podremos recoger la planta, dejando el espacio para poder trasplantar la planta germinada a la mesa de cultivo. De esta forma ya tendremos la rueda hecha para que siempre tengamos verduras plantadas.

Esperamos que estos consejos os hayan sido útiles. ¡Buena cosecha!